
Cuando me dejaste se mudaron a mi pequeña estancia, diablillos y fantasmas burlándose de mi soledad preciada, y castigándome a no poder disfrutar de mi dulce melancolía.
Nuestra historia finaliza en mi olvido, pero ahora comienza de nuevo por que empiezo a recordarte, y sigo recordándote. Y continúo.
Tratando de centrarme, de llevar una amistad con mi compañera de piso, la soledad, discutimos, tirados en el diván, mientras el tiempo pasa sin parar, y tú, eres ese viento que no aquieta, arañas los cristales, ruges por las noches, descargando tu furia en los aleros.
No me queda más remedio que dejarlo todo y salir afuera.
Y entonces estoy perdido, por que comienza todo de nuevo, por que comienzo a recordarte cuando creí que ya te había olvidado.
Picture courtesy of Juvenile-A from Flickr.
No comments:
Post a Comment