Como gran seguidor de toda la vida de Erovisión, debo admitir, que la edición de este año ha sido desde mi punto de vista gratamente sorprendente en lo que al país ganador se refiere, pero un tanto vacío de contenido encuanto a lo que el programa nos tiene ya acostumbrados desde hace años.
Por una parte, como ya es clásico, las votaciones se pudieron intuir en referencia a lo político-social entre paises vecinos. Por otra, este año ha sido un año relajado dónde musicalmente han destacado las baladas y los downtempo. Se han dejado de lado las esceficaciones espectaculares (que ya se han vuelto un clásico en el festival Europeo) por una puesta en escena sencilla y un tanto intimísta, quizá, queriendo despuntar más por valores vocales y musicales que por el típico espíritu eurodance kitch de siempre.
Cada año yo y mis amistades celebramos una fiesta en casa y votamos y evaluamos las actuaciones de cada país.
Este año hablando en primera persona mi "score" de clasificados fue:
1. Ucrania
2. Alemania
3. Albania
4. Georgia
5. Moldavia
6. Islandia
Tipical Erovision:
El Noruego Didrik Solli-Tangen, un chulazo en toda clase y posiblemente el futuro padre de mis hijos si no me quedase tan a desmano, me puso por una moto aunque sólo por unos segundos, ya que tras abrir la boca, se me bajó toda la líbido con esa balada terrible y sus desafinos.
Milan Stanković representante de Serbia, nos deleitó con un tema pegadizo y kitch con un perfíl típico del festival. Yo me creía que era una chica hasta que empezó a cantar. Tenía un look de los más neo-travesti. ¡Que fuerte!.
Las decepciones:
Grecia, Turquia e Israel; paises que nos tienen acostumbrados a temas pegadizos y buenas puestas en escena, han patinado enormemente esta edición.
A destacar Grecia e Israel, que para mí, ha sidon de lo peor de toda la noche.
Los incomprendidos:
Ucrania, Albania, Rumania y Georgia: Muy buenos temas que se han quedado a la sombra con muy pocos votos.
Lo peor de la noche.
Sin duda Rusia, Grecia, Israel, España (como siempre) e Inglaterra.
El vencedor:
Alemania se lleva la palma en cuanto a votos y popularidad, y no es de extrañar.
Si bien es cierto que la canción no tenía el típico perfíl Eurovisivo en conjunto de la frescura, el ritmo pegadizo y la voz de Lena con un toque muy a lo Lily Allen ayudó a ser el país ganador de esta edición, algo que me alegra por que nos deja buen sabor de boca y nos deja imaginar (que no cuesta nada) que quizá el festival está cambiando a mejor, y que se adapta a los nuevos tiempos, y que ya era hora de que se proclamase vencedor alguien que se lo merece en base a su talento, a en referencia a conveniencias político-sociales.
Os dejo el tema vencedor seguido de mi preferido...
Que los disfrutéis.
¡Nos vemos en Alemania el año que viene!.
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